Luis Enrique, como si nada.
Luis Enrique continúa en las quinielas como candidato a sustituir a Tito Vilanova en el banquillo del Barcelona mientras la actividad del asturiano sigue girando en torno al Celta. El ruido mediático, de proporciones internacionales, continúa sin alterar la pretemporada del conjunto celeste en Melgaço. En Praza de España insisten en que nadie del Barça les ha preguntado por Luis Enrique. En la ciudad condal esperan que hoy se desvele quién será el encargado de entrenar en el Camp Nou la temporada que viene.
Y mientras las opciones que maneja la prensa sobre el sustituto de Vilanova se acotaban a Luis Enrique y al argentino Gerardo Tata Martino, el técnico del Celta aprovechaba la jornada de descanso del equipo vigués en la concentración de Melgaço para compartir con el resto de técnicos, auxiliares y jugadores unas horas de esparcimiento en aguas del río Miño. "Ha sido para hacer grupo", proclamaba el técnico del Celta tras divertirse con el rafting.
Ante este comportamiento de Luis Enrique y sus colaboradores ayer parecía poco probable que el entrenador pudiese estar negociando la ruptura del contrato que hace apenas un mes firmó con el Celta, con la intención de irse al Barça.
Ajeno a las informaciones que insistían en que era una de bazas que manejaba Sandro Rosell para el banquillo azulgrana, el asturiano siguió a lo suyo en Melgaço. Se subió a la bicicleta que se llevó a la concentración de pretemporada del Celta y dio un paseo acompañado de su ayudante Juan Carlos Unzué. Más tarde, colgó en su cuenta de Twitter una fotografía en la que aparecían ambos con indumentaria de ciclistas y añadió un mensaje: "El equipo Aurun Store/hed de nuevo en marcha. Soltando las piernas y la cabeza", un mensaje con el que parece transmitir cierta normalidad.
J.Conde, Faro de Vigo
www.farodevigo.es/deportes/2013/07/22/luis-enrique-centrado-trabajo-celta/849329.html